lunes, 18 de enero de 2010

¡Sr. Fabricante: por favor, ayúdeme y no me maree más!

Ultimamente, me produce un poco de agobio ir a determinados lineales de las grandes superficies. Ya tuve esa sensación este verano en el lineal de de los yogures de un supermercado y la he tenido la semana pasada en el lineal de los champús.

¿Os habéis planteado la hipersegmentación de yogures que hay? Yogures con azucar, sin azucar, los 0 calorías, los de frutas en todas sus versiones, los desnatados, los bio, los con cereales, los que se beben, etc, etc, ectc. Y de los champús ¿pero hay tantas clases de pelos como de champús remedio? Para cabello liso, para el rizado, para el que se encrespa, para el teñido, para el seco, para el graso, para el que le da el sol, para el que se seca con secador o para los que se seca con pinzas. Así, un suma y sigue...

Mira que soy especialista en marketing relacional y mira que reconozco que, efectivamente, hay consumidores de todo tipo. Pero pienso que en "algo" nos estamos confundiendo.

Ayer, como cada domingo, esperaba con impaciencia (reconozco que me encanta) la emisión del programa Redes de Eduardo Punset. En él se trató un tema "Por qué más es menos" que me "me vino al pelo" para escribir este post. Habló de la "sobreoferta de elecciones" a la que nos enfrentamos todos los días para hacer cualquier cosa y la cantidad de energía que perdemos en decidir en cosas tontas y, a veces supérfluas, como puede ser la elección de un yogur o un champú.

Explicaba que, hace años, el hecho de que hubiera menos oferta, hacía que la gente realmente "perdiese tiempo" en estar con los amigos, la familia, la pareja, un trabajo y emplease el tiempo en decidir sobre cosas importantes. Ahora, perdemos energías en hacer elecciones de todo, siempre maximizando la mejor elección y ponemos casi las mismas energías en la elección de un yogur que en hacer una elección más trascendente, como puede ser la búsqueda de un empleo. Esta situación, explicaba, se ve agravada en los jóvenes.

Ásí, hablaba de dos tipos de personas los "maximizadores" los que siempre están buscando la mejor oferta, el mejor precio, el mejor sitio y que, contínuamente están insatisfechos y se sienten culpables porque siempre va a haber una elección mejor y, por lo tanto, son infelices, y los "satisfactores" aquellos que se sienten satisfechos con unos mínimos y, sabiendo que pueden existir otros productos mejores que su elección, se conforman, porque les compensa emplear su tiempo en cosas importantes. Estos, añadía, eran más felices.

Resumiendo, si tanto nos preocupan nuestros clientes, respetémosles, ayudémosles a elegir nuestro producto sin una sobreoferta de elecciones. Démosles, felicidad. Dejemos que empleen su tiempo en cosas importantes... No nos creamos el ombligo del mundo, porque no lo somos.

Pincha aquí, para ver el video de "Por qué más es menos"

1 Comentario:

Tonino dijo...

Muy bueno el Post Mar!!!!
La verdad es que no paran de bombardearnos con mil y una historias, te faltaban los yogures de Soja,jejejejjej.
Un saludo.