
En esta edición, la cifra de participación asciende a 27.500 corredores inscritos y otros 3.000 que correrán sin dorsal, llegando a un total de 30.000.
Pero ¿Cómo se logra una capacidad de convocatoria tan importante, que convierte a la San Silvestre Vallecana en la primera carrera de referencia mundial en esta fecha?
A continuación, les contamos la estrategia que se ha seguido este año: la presencia en redes sociales, las técnicas de marketing viral y, distintos eventos, han sido algunas de las herramientas utilizadas para alcanzar este logro.
La promoción de la carrera se inició con la elaboración de un

Dicho perfil obtuvo tanto éxito que, cuando se editó la “Guía del Corredor”, documento que se encartó en la revista Runners, se decidió poner un diseño muy similar a la conocida red social.
Otra de las tácticas utilizadas es, que a la hora de cumplimentar la inscripción a la carrera, cada participante debía indicar la calle por la que suele correr. Así, en la página de la San Silvestre Vallecana se iba elaborando un ranking de calles, entre las que se encontraban la Castellana o María de Molina.
Precisamente en base a esto, se organizó un evento e

Por último, también se rodó un viral jugando con la incógnita del color de la camiseta, que ha cambiado durante los últimos años. En un vídeo, el atleta Chema Martínez corría por el recorrido de la San Silvestre Vallecana mientras su camiseta cambiaba de color bajo el slogan “¿De qué color será la camiseta de este año?”
Todas estas acciones estaban dedicadas a potenciar el efecto de “boca a boca” que ya existe sobre la denominada “mejor San Silvestre del Mundo”.
Foto 1: EFE